Una de las responsabilidades principales que se adquiere al darse de alta en Hacienda es realizar el pago en tiempo y forma del impuesto sobre el valor añadido, IVA. Este se realiza cada tres meses por lo que comúnmente recibe el nombre de IVA trimestral. Dicho pago corresponde a los meses de abril, julio, octubre y enero.
Normalmente el impuesto del IVA se declara con el modelo 303, sin embargo, este puede variar dependiendo el régimen fiscal en el que estés tributando y la actividad económica que realices. Por tal motivo, deberás asesorarte con anterioridad sobre el modelo que debes usar al presentar tu declaración trimestral.
Con respecto a la fecha límite en la que debes presentarla, normalmente tienes hasta principios de la tercer semana del mes correspondiente. Sin embargo, en el mes de enero normalmente tienes disponible todo el mes para presentarla.
Una excepción de esto es si deseas realizar el pago por medio de pago domiciliado, pues en este caso la fecha límite será el día 15, a excepción del mes de enero que tendrás hasta el día 25 como fecha límite.
Con el fin de evitar cualquier tipo de recargo por no haber presentado la declaración en tiempo y forma es muy recomendable que agendes estos pagos para el principio del mes correspondiente. Así podrás tener tiempo suficiente para solucionar cualquier imprevisto y ponerte al corriente.
Ahora bien, la razón por la que en el mes de enero tienes más días para presentar la declaración es porque adicionalmente tendrás que presentar el Modelo 390, que es la Declaración resumen anual del IVA. Sin embargo, en este caso no se trata de un pago adicional que debas realizar, más bien se trata de un resumen de la actividad económica relacionada con el IVA durante el año. Además, debes tener en cuenta que es necesario que realices esta declaración aunque ya te hayas dado de baja antes que finalizara el año. Y también debes recordar que existen otros modelos que debes presentar anualmente en tus declaraciones.
Cómo evitar sanciones al presentar el IVA trimestral
Una de las principales razones por las que muchos autónomos se hacen acreedores a sanciones es por presentar la declaración del IVA después del tiempo límite. Aunque normalmente tendrás tres semanas una vez finalizado el trimestre para presentar la declaración, es preferible que no esperes hasta el último día para hacerlo. Esto es así porque en caso que haya algún error o que se te pida que aclares algún aspecto tendrás tiempo suficiente para hacerlo antes que finalice el tiempo límite. En caso contrario, se entenderá que has presentado la declaración después de la fecha límite con lo que será acreedor a una sanción por parte de Hacienda.
Otra situación en la que podrías enfrentar te es que al momento de presentar la declaración del IVA trimestral no cuentes con los fondos necesarios para poder pagarla. En tal caso puedes recurrir al aplazamiento del pago trimestral del IVA. Así tendrás otra opción para mantenerte al día con el pago de los impuestos tributarios.